El Perú es un país multidiverso. Por dónde se mire encuentras diferente, sea por la gente, paisajes, climas y, por supuesto, las plantas y animales. Todo esto ayuda a dar una imagen interesante al país pero también nos deja una tarea pendiente: usar al máximo nuestro potencial, principalmente de los recursos naturales.
Creo que recién en la última década hemos descubierto que hay mucho por descubrir en el país y que pue
de exitosamente exportarse como muestra de nuestra diversidad. Por ejemplo, las frutas de la selva como la cocona y el camu camu son más conocidas y salen nuevos productos a base de éstas o el creciente uso de la maca, kiwicha o sacha inchi así como del yacón, café o el algarrobo. Es evidente que entre estos recursos (y muchos otros) están las oportunidades de negocio que podemos generar y que probablemente sean viables económicamente.
de exitosamente exportarse como muestra de nuestra diversidad. Por ejemplo, las frutas de la selva como la cocona y el camu camu son más conocidas y salen nuevos productos a base de éstas o el creciente uso de la maca, kiwicha o sacha inchi así como del yacón, café o el algarrobo. Es evidente que entre estos recursos (y muchos otros) están las oportunidades de negocio que podemos generar y que probablemente sean viables económicamente.Para este ciclo en la universidad tengo que hacer un plan de investigación de un estudio que posteriormente realizaré. Mi idea siempre fue aprovechar los recursos naturales del país, hacer algo interesante. Inicialmente pensaba en algo relacionado con las frutas de la selva pero mucha gente ya había hecho casi todo acerca de éstas en años anteriores. Estoy casi seguro que la mayoría no le interesa mucho este tema pero como está de moda lo elijen, cayendo en repeticiones y temas muy comunes.
Me vi obligado a observar otras opciones, a investigar acerca de otros productos y luego de tener muchas ideas (algunas buenas, otras no tanto y otras ya elegidas) llegué a escoger el algarrobo. Para variar, ya había algo con la algarrobina (el producto más conocido de este árbol) pero yo tenía en mente otras opciones que había investigado. Finalmente escogí el café de algarrobo.
Este producto me pareció una interesante alternativa al café tradicional, no tiene cafeína y tiene más proteínas y minerales. Leí que más bien tenía un sabor dulce (más parecido a la cocoa) y que podía usarse en pasteles y en otros alimentos.
La idea es interesante, poco a poco tendré que investigar más y tal vez más adelante pueda implementarla.
