domingo, 23 de mayo de 2010

Sweet Emotion

Eran las 9:30 PM. Un telón negro con el logo de Aerosmith cubría el escenario para unos minutos después se levantara y empezara el concierto con la gran "Eat the Rich". Un muy buen concierto el que viví ayer en la Explanada del MonUmental, creo que conforme van pasando las horas me voy dando cuenta de lo que fue y que realmente fue algo increíble.

Pocas veces se ha visto un espectáculo con un sonido impecable y un escenario magnífico. En ese sentido estuvo perfecto. La presencia de Steven Tyler fue impecable, una persona sumamente estrafalaria y que demostró un gran dominio del escenario. Es muy bueno lo de Joey Kramer, el baterista, que enseñó lo que es tocar la bateria por un maestro; incluso en un momento lo hizo con los puños cerrados y hasta con su cabeza. Lo de Joe Perry también es genial mostrando gran dominio de su guitarra tocando sin mirar, de espaldas y haciendo dúos con la bateria de Kramer.

Para mí lo único que se puede cuestionar es parte del setlist. Como que la primera mitad del concierto estuvo muy buena pero luego empezaron a tocar a canciones menos conocidas y, sumado al poco entusiasmo del público allí, estuvo en realidad algo aburrido. Sin duda la canción que faltó fue I don't want to miss a thing o tal vez Hole in my soul, me dio bastante pena que no la tocaran y tal vez por eso llegué a estar algo desanimado dándome poco a poco cuenta que fue un gran concierto.

Los mejores momentos del concierto estuvieron al inicio con canciones como Love in the elevator, Dream On, Jaded o Cryin' (siendo esta la mejor y más ovacionada) , entre otras. En el cierre también al momento de Crazy o Walk this Way también se vivieron grandes momentos. Definitivamente dos horas de buen rock y blues.

Ahora les pongo unos videos del concierto que encontré, si bien yo también grabé algunas partes de las canciones no he podido pasarlas a mi computadora.




martes, 18 de mayo de 2010

Super campeones

Puedo decir que Supercampeones fue el mejor dibujo animado que he visto, junto a Dragon Ball. La historia de un niño japonés que era la más grande estrella de fútbol en los clásicos campeonatos escolares para luego ser la mayor figura en la selección de su país. Cuando tenía unos 8 años y no sabía nada de fútbol puedo afirmar que con este dibujo animado aprendí acerca de este deporte y me llevó a aumentar mi fanatismo.

Está claro que la imaginación de los japoneses no tiene límite, desde las increíbles atajadas y piruetas de los arqueros, el tiro del tigre y todo lo que se demoraban en llegar al otro arco. Es casi seguro que todos los niños de mi generación crecieron viendo este dibujo, tanto así como Dragon Ball.

Nunca se supo cuál fue el final. En todo caso no salió al aire. Todo esto lleva a miles de especulaciones las cuales son increíbles y algunas hasta traumáticas. Hace unos meses me comentaron acerca de una versión en la que decía que todo era un sueño, Oliver nunca jugó todo eso sino fue parte de su imaginación. Al inicio de la serie, él fue atropellado pero según la historia la pelota de fútbol lo salvó (algo que según esto sería falso). La verdad que esto me chocó y me dejó bastante pensativo. Me empecé a preguntar: ¿Qué pasa si me hubieran dicho esto cuando era niño? ¿Si yo le cuento esto a alguien de 10 años cómo reaccionaría? Creo que el golpe sería bastante alto, comparable a que le digan que no existe Papa Noél o que no hay ningún ratón de los dientes.

Probablemente esta versión sea falsa, es más, hay poca información y no hay mucha evidencia que lo comprueben. Lo que sí está mal es que, en caso de ser mentira, se juegue así con el sueño o la ilusión de los que vimos el dibujo. Y si es verdad, que los creadores no se hayan puesto a pensar en el impacto que generaría un final así. Bueno, el tiempo dirá la verdad.