domingo, 19 de noviembre de 2017

Somos Perú y estamos de vuelta

Locura y algarabía total. La hinchada celebra toda la noche y se desplaza por las calles de la ciudad en un mar lleno de camisetas y gente alentando. El sueño finalmente se había cumplido y para todos los peruanos la pesadilla había terminado.

Celebraciones de hinchas - Clasificación de Perú a Rusia 2018
Lima, 15 de noviembre de 2017. El árbitro Clement Turpin daba el pitazo final y la emoción contenida por 35 años de larga espera se terminaba. Perú estaba de vuelta. Rusia 2018 es el destino de la selección peruana y su primera aparición mundialista desde 1982. Sí, casi 4 décadas pasaron, muchas eliminatorias y derrotas muy dolorosas que finalmente llegaron a su fin.

En mis casi 30 años de vida nunca había visto a Perú en el mundial. Así como yo, un 72% de mis compatriotas tampoco. No merecíamos esperar tanto. Pero esto ya es parte del pasado. Solo queda mirar hacia adelante y de una vez por todas de deshacernos de esa pesada mochila de 35 años. Y estoy seguro que todo cambiará.


La felicidad extrema en lo desconocido. El Perú amaneció con otro semblante, la selección de fútbol fue (y sigue siendo) el único tema de conversación en el país. El peruano está acostumbrado a sufrir y a veces más de lo que debería, las frustraciones acumuladas, la propia historia te carga con un pensamiento pesimista que trasciende el ámbito deportivo. Y este logro contribuirá a que todos nosotros seamos más optimistas y, sobre todo, que creamos en nosotros y en lo que podemos conseguir.

Premonición Rusia 2018
Nunca más (espero) se use el "cuando Perú vaya al mundial" para notar algo imposible, algo inalcanzable, ese momento en el que estaré seguro que no tendré que cumplir. La histeria colectiva llevó a que todo quien nos haya hecho una promesa así, ahora nos tenga que pagar, sacar una cita o darnos eso que tan confiadamente dejó que el tiempo se lo lleve.

Debo decir que estoy muy feliz. El sueño se hizo realidad. Por fin podré coleccionar el álbum Panini del mundial y ver a mi selección dentro. Farfán, Rodríguez, Gallese, Tapia, por nombrar solo unos cuantos tendrán su lugar. Ojalá que el cromo especial le corresponda a Guerrero, quien lo tendría más que merecido y a quien todos esperamos ver en Rusia 2018. Él más que ningún otro debe estar allí, por lo que la luchó, por todo lo que nos dio y por lo que podría darnos como equipo en Rusia.

Celebración de la selección peruana (Foto AFP)
Esto es solo el comienzo. Los días pasan y cada vez faltará menos para el inicio de Rusia 2018. Este 1ro de diciembre daremos un paso concreto más con el sorteo de la fase de grupos. Perú debe ir con humildad, teniendo en cuenta que no vamos hace 35 años al mundial. Qué grande sería que clasifiquemos la fase de grupos pero hay que ir paso a paso y sin presión.


El Perú está de fiesta, señores. Y todo Latinoamérica celebra. Las muestras de cariño de muchos países son realmente motivadoras y nos hace ver que el Perú es un país querido y respetado en el mundo. Gracias por este momento, gracias por esta alegría, gracias por hacernos olvidar por un momento de los problemas y por liberarnos de la tensión de tantos años de sufrimiento y tristeza. Ahora puedo decir SOMOS PERÚ Y ESTAMOS DE VUELTA.

domingo, 5 de noviembre de 2017

Guerrero y el futuro de Perú

La noticia del último viernes cayó como un baldazo de agua fría a todos los que seguimos a la selección peruana y que queremos que Perú vaya al mundial por primera vez en nuestras vidas. Paolo Guerrero es el ídolo máximo de la selección. El goleador histórico, el símbolo de garra, el líder y la figura más representativa y querida de los últimos tiempos.

La FIFA dictó una suspensión preventiva de 30 días sobre Paolo con lo cual se confirmó que no estará en los partidos ante Nueva Zelanda. Dentro de todo, la buena noticia es que aún no hay una sanción oficial por lo que todavía hay esperanzas de que Guerrero pueda asistir a Rusia 2018 si es que clasificamos.

Paolo Guerrero - posible doping
Como hinchas, esta noticia nos ha impactado y golpeado, en cierta forma, cómo vemos salir airosos del repechaje. Lo cierto es que, en el papel, Perú sigue siendo más que Nueva Zelanda. Sin embargo, eso lo tenemos que demostrar en la cancha. Cuando suene el pitazo inicial en Wellington veremos si esto desmotiva al equipo o lo fortalece, tratando de sacar el partido adelante por su capitán y por los 32 millones de peruanos.

Por el bien de todos, espero que clasifiquemos. Y si se da, que Paolo pueda estar. No me quiero imaginar lo que debe estar sintiendo en este momento. Gran impotencia, frustración, ver cómo todo lo que has buscado está a punto de desvanecerse y que podría no haber marcha atrás.

Más allá de las adversidades que siempre enfrenta Perú, confío en que saldremos adelante y clasificarnos al mundial por primera vez en más de tres décadas. Y, Guerrero estará allí cumpliendo su sueño y el de todos los peruanos. ¡Vamos Perú!