miércoles, 28 de agosto de 2013

Te vamos a extrañar Alme

Definitivamente uno de los momentos más tristes y una de las decisiones más complicadas de mi vida. ¿Cómo entender qué es lo mejor? ¿Cómo entender que no hay forma de que se recupere? Que no vale la pena hacer sufrir a alguien que no podrá volver a ser como antes y que su esperanza de vida es muy baja. Es realmente complicado. La muerte de un ser querido y de nuestras mascotas es un impacto muy duro. Y más aún si la decisión de cortarlo "por lo sano" pasa por nosotros, una decisión más humana que clínica.


Hoy ha sido uno de los días más tristes en mi vida. Mi familia y yo decidimos que se le practique eutanasia a mi perrita Almendra. Estaba ya muy decaída y hace varios días que ya no comía. La llevamos al veterinario y luego de unos análisis, los resultados arrojaron que su sistema renal había colapsado y que estaba muy grave por lo que las opciones de tener una vida normal eran nulas. Debía seguir un tratamiento de aquí en adelante y aún así no se podía garantizar nada.


Me daba mucha pena verla tan decaída, que no quiera comer (como siempre había querido hasta por demás) y que solo se dedicara a dormir. Cuesta asumirlo. Cuesta demasiado. Pero no valía la pena que siga viviendo así y lo mejor era que pacíficamente descanse en paz y no porque su organismo ya no pueda más. 


¿Ustedes qué harían si ya superan que van a morir? Podrían planificar lo que más les gusta y disfrutar cada minuto. Pues eso hicimos con Alme. Si bien ella no puede elegir, le dimos un tour por los sitios que más le gustaba estar, en la casa y en el parque. A pesar de lo mal que se podía sentir, quisimos que disfrutara lo más posible, dándole todo el cariño posible hasta el último segundo.


Luego de su deceso, la llevamos a cremar. Allí le dimos una última despedida y esperamos que terminara el proceso. En ese lapso, mientras esperábamos, se acercó corriendo Pascual, un shit-zu (su misma raza) hacia nosotros. Incluso se trepó al sillón donde estábamos para que le hiciéramos cariño. Fue muy curioso porque bajó las escaleras y se vino de frente hacia nosotros, como si nos conociera de hace muchos años. Pienso que fue el alma de Almendra que quería despedirse por última vez.


No pude terminar de escribir este homenaje sin derramar algunas lágrimas. Estos casi 12 años han sido increíbles y me has llenado de una felicidad indescriptible. Me has ayudado en muchos sentidos y has sido una espectacular compañía. Nunca te voy a olvidar y te extrañaré muchísimo Alme.

Descansa en paz Alme, te lo mereces, has sido una gran hermana.

domingo, 25 de agosto de 2013

La curiosa historia del Iphone

Un iphone es quizás el celular más codiciado del mercado en estos años. Apple ha mantenido su estándar de calidad y el prestigio de su marca nos hace sentir que si tenemos un iphone tenemos cierto estatus. A pesar de esto, al comprar un equipo móvil debemos evaluar varios aspectos, sobretodo si realmente necesitamos (y vamos a usar) todas las funcionalidades que tiene o si va acorde a nuestro momento de la vida.

Decisiones que debemos tomar
Eso me pasó a mí. Soy una persona que evalúa bastante sus decisiones por lo que hasta hace algunas semanas estuve considerando comprarme un nuevo celular. Estuve a un clic de comprar un iphone 5. Luego de analizar los pros y los contras, desistí. Semanas después adquirí un Samsung S3 Mini, equipo que inicialmente no figuraba ni en los planes. Ahora estoy súper feliz con ese celular y 100% seguro y satisfecho de haber tomado esta decisión.

Lo que quiero contar con esta anécdota es que a veces tenemos grandes decisiones que tomar y que, a pesar de que estemos a punto de tomar una decisión determinada, no la concretamos; sin embargo, sale una mejor oportunidad después y el tiempo nos da la razón. No siempre será así, nos podemos equivocar pero lo que sí debemos entender es que todo pasa por algo y tener paciencia puede tener recompensa en un tiempo no muy lejano.

domingo, 4 de agosto de 2013

La hazaña del vóley peruano en el Mundial de Tailandia

Nuevamente el vóley es el deporte que nos da alegría. Millones de peruanos madrugando durante las dos últimas semanas viendo cómo estas chicas daban hasta la última de gota de sudor y remontar partidos durísimos, algunos frente a rivales que en el papel eran superiores a nosotros. Han demostrado gran potencial y un cariño inmenso por el país. 

Un cuarto lugar impensado en la previa pero que nos deja un sabor algo amargo ya que tuvimos todo para ganarle a China y pasar a la final. A pesar de ir ganando 2-0 y que no pudimos cerrar el partido estando 14-10 y luego perder varios match points más. Sin embargo, creo que hay muy poco que reprocharle a las chicas. Se luchó de igual a igual con selecciones que tienen decenas de veces más presupuesto que nosotros; que tienen una infraestructura superior y que las condiciones de entrenamiento son más cómodas y avanzadas. No considero para nada mediocre celebrar un cuarto puesto cuando se llega a la lucha con una desventaja tan evidente.

Perú en el Mundial de Tailandia 2013
Aquí es donde el gobierno debe cumplir un papel fundamental. El apoyo al deporte a lo largo de nuestra historia ha sido casi nulo. Esto ya debe cambiar si se quiere obtener resultados sostenidos a largo plazo. No podemos dejar que el talento de estas chicas se diluya por falta de apoyo y malas condiciones. La creación de un Ministerio del Deporte ayudaría bastante. Además, no se puede esperar grandes éxitos deportivos si es que no hay un presupuesto razonable. A nivel de Sudamérica tenemos uno de los presupuestos más bajos, nada acorde con el momento económico actual. El gobierno debe tomar esto, por último, como un beneficio político, aprovechar todas las ventajas que una victoria deportiva genera en la población y así subir su popularidad.

Líneas aparte para lo de Natalia Málaga, digno de resaltar. A pesar de su polémica forma de dirigir creo que logra que sus jugadoras capten el mensaje y reaccionen casi siempre. Su manejo en menores es bastante bueno y me parece que en unos años debería coger el mando de la selección de mayores, aprovechando así la continuidad de esta generación de chicas.